Acatando el mandato de la Asamblea de AJUPTEL-Táchira del pasado viernes 10 de abril 2015; asistimos como DELEGADOS a la VII Convención Nacional de Fetrajuptel: Marvelis Sánchez en mi condición de Presidente, José Linares miembro del Comité. Ejecutivo, y los delegados elegidos por la base: Omar Peña, Carmen F. de Joya y Jesús Alberto Alviarez. Una vez constituidos como Delegados de Táchira comenzamos reuniones semanales acordando NO hacer alianzas hasta que estuviéramos en el sitio de la Convención para escuchar y conocer a los posibles aspirantes, ya que toda decisión a tomar debía ser en consenso por los cinco y así mismo se cumplió.
Con el pasar de los debates que se desarrollaron en un ambiente tenso, altisonante y por demás hostil, y sin tener que discutir a quien apoyaríamos ya estábamos de acuerdo, por lo que Táchira en conjunto decidió apoyar y participar en una de las planchas. En mi caso concreto para participar deje claro que la nomina presentada debía reorganizarse y poder conformar un equipo de trabajo y así se logro. He aprendido en estos últimos años que toda plancha que se presenta no siempre esta conformada como una quiere, pero en este equipo comparto con personas con las que me une la voluntad de servir al prójimo y el objetivo de hacer de Fetrajuptel una institución óptima en todos sus ámbitos.
Sé el tamaño del compromiso adquirido por tanto no voy perder mi valioso tiempo leyendo comentarios negativos acerca de mi persona, menos de quienes jamás han cruzado al menos un saludo conmigo, escribir por escribir es fácil, desacreditar es casi un deporte.
Soy un mujer trabajadora y mi único pago en este nuevo proyecto que comienzo es el mismo que recibo como Presidente de AJUPTEL-Táchira. Pudiera hacer un escrito detallado de todo lo acontecido antes, durante y después pero no soy polémica. Menos palabras.......más acción.
Saludos
MARVELIS SANCHEZ
-No siempre quien mas grita, atropella y ridiculiza tiene la razón-
MI PEQUEÑA VENEZUELA
Por: Carmen Terán
Hoy después de los últimos acontecimientos de lo que fue la Jornada de trabajo de la VII Convención de FETRAJUPTEL, no me queda duda que esta Federación es una pequeña muestra de lo que es nuestro país: VENEZUELA, sin duda que el problema más grande que tiene nuestro país es la mentalidad de sus habitantes, de su pueblo, la sociedad, su gente, su forma de pensar, de ver las cosas en su entorno, las personas nos quedamos viendo el árbol y no vemos el bosque, y es ahí donde radica el porqué no terminamos de salir de este círculo vicioso de conflicto que solo nos lleva a desgastarnos. Cuando dije que iba a la Convención llena de ilusiones, esperanzas, expectativas abierta a las oportunidades y posibilidades jamás pensé llegar a formar parte de la Directiva de la Federación, con la sola convicción de mi fe en la gente que asistirían a ese evento, sin embargo y vistas las conversaciones telefónicas que hasta esa fecha había tenido con algunos de mis compañeros sabia que esto venia color hormiga, todos absolutamente todos me preguntaron: ¿con quién iría? a lo que contesté sin duda alguna que desconocía por quién votaría pero si sabía por quien no iba a votar, y sabia que no votaría, por personas que tuvieran una posición cerrada, radical a las personas, a los eventos y a las circunstancias, ya que esto en el tiempo ha demostrado que solo añade más problemas a los que ya tenemos.
Todos absolutamente, con las personas que me hicieron propuestas de alguna u otra tendencia les dije no iba entubada porque creo en las personas y su generosidad, sentido común, sindéresis, hasta que me demuestren lo contrario y si en algún momento hubiese ido entubada en alguna plancha indudablemente lo hubiera hecho por nuestro Líder natural, quien nos dio a todos libertad de acción ya que así lo demostró, que nuestra organización no llevaba ninguna otra propuesta que no fuera 1.- La de la modificación de los Reglamentos de la Federación y 2.- Una comunicación contundente a la Gerencia de Salud de nuestra Empresa, propósito y objetivos que sin dudas fueron logrados, salvo que no son el primero de aplicación inmediata, tal como quedó establecido, a pesar y vaya mi ingenuidad, pero con la certeza que nosotros no teníamos plan “B”, por eso ahí se dividen nuestras opiniones y cada quien tomó decisiones de acuerdo a su propio criterio a nadie de nosotros por parte de nuestro Líder, se nos impuso tendencia. Ya instalada dicha Convención, no me quedó duda que el clima era hostil y tenso, cosa que nos incomodó a todos, pero fueron grandes los esfuerzos para encaminar las sesiones por el camino indicado, luego durante el evento, hubo una plancha que se atrevió y dio me la oportunidad de formar un equipo de trabajo, el cual una vez que me informaron como estaba conformada rechacé de forma inmediata y sin titubeos, sin dar más explicaciones y sin poner más condiciones que las que estaban en tener un equipo de trabajo que trabaje para los objetivos y propósito del Bienestar del gremio, ya que siempre he trabajado en equipo, donde no hay pirámide, pero donde todo el mundo trabaja y trabaja, no de manera personal y sobre los hombros de una sola persona, eso no quiere decir que este equipo presentado fuera bueno o malo, sino que según mi criterio, no satisfacía mis expectativas muy de logros y éxitos. Posteriormente esa misma plancha me presentó otra organización, con un equipo que sé, son personas trabajadoras que pertenecen a mi escuela, que saben que individualmente los objetivos se ponen cuesta arriba, pero a pesar de que esta misma plancha está presidida por una persona con quien tengo muchas diferencias del cual él mismo está consciente, acepté porque esa persona me ha aceptado a mí por lo que soy, no por las concesiones que pudiera obtener de mi como profesional, trabajadora social y política ya que considero que la política no tiene espacios en nuestros gremios y menos económica, condición última que no existió, así que lamento no poder compartir los $ que estaban en el maletín porque el mismo pertenecía a otro excelente compañero el y hasta la presente desconozco su contenido y sabiendo lo honesto que es, tampoco llevaba dinero para comprar conciencias.
Para negociar es necesario: 1.- Saber escuchar; 2.- Trabajar en equipo; 3.- Respetar las opiniones e ideas de los demás; 4.- Ser una persona que pueda controlar su emociones y no darle a demostrar al oponente nuestras debilidades, miedos y temores; 5.- Tener la mente abierta a las oportunidades y posibilidades, y esas personas las cuales a algunas conozco directamente su trabajo y como seres humanos me demostraron que con ellas se puede lograr un buen equipo de trabajo. Cuando dije, sabia por quien no iba a votar, se trataba de personas anárquicas, individualistas, inseguras, una no se puede sentar a negociar algo bajo las amenazas y presión del propio gremio al cual defiende y menos ponerse a negociar con el contrario teniendo en la mesa 4 piedras, 2 pistolas y un fusil, lo dicho Dios nos diferenció de los demás animales, porque nos dio un cerebro para pensar y una boca para conversar, para sumar, edificar y construir y no para lo contrario, levantar falsos testimonios de nuestros compañeros además de insultarse, maltratarse y ponen en tela de juicio el prestigio y reputación de muchos. Por lo tanto todos podrán decir y opinar de mi lo que se les ha venido a la cabeza cada una es un mundo y es responsabilidad de cada quien como lo utiliza, asumiendo sus consecuencias. A quienes han opinado con ligereza insultándome sin conocimiento de causa, solo me han demostrado que no me equivoqué en mi elección, que Dios mi Señor Todopoderoso una vez más me dio sabiduría para indicarme y proteger mi decisión, eso tampoco quiere decir que haya sido la mejor, casi todos son muy buenos solo que no sabemos con certeza que queremos y cuál es el camino más expedito para alcanzar los objetivos, a lo mejor he tomado el camino más largo pero con la convicción que finalmente llegaremos a donde nos hemos planteado.
Ante lo expuesto, recuerdo a una Señora Jubilada que considero una persona seria, equilibrada, y segura de sí misma a quien le manifesté y la invité a ir a la Convención, me manifestó palabras más palabras menos “Que ella era muy cuidadosa de su reputación y estas actividades se prestaban para ser utilizadas de manera, poco seria, irresponsables y negativas para las personas”, cosa a lo que le dije que tenía razón pero que ese era un riesgo que había que correr y que lo pusiera en una balanza, sin dudas ella tenía razón, pero bueno yo decidí correr el riesgo y asumir el reto tomar la decisión de trabajar para todos, sabiendo a pesar de todo que es mejor luchar que quedarse sentada de brazos cruzados, yo no prometo nada, más que resultados los que se puedan obtener en equipo.
Aun así, doy mil gracias a mis compañeros que votaron por mí, en esa plancha ya que así me lo manifestaron, confían en mi trabajo, palabra, comportamiento y acción. También doy gracias a todos los que se dedicaron a hacer de mi integridad un coleto y les digo tengo una familia bellísima consolidada que me apoya en todas las acciones y circunstancias Gracias a Dios, entienden el riesgo que se corre al querer hacer un trabajo colectivo y gozan de perfecta salud y Bienestar, mi hermosa madre goza de perfecta salud, gracias a Dios, debo darle gracias a todo el que me la recordó, estábamos distantes en ese momento. Todas estas cosas fortalecieron mi espíritu de medir lo importante que soy para todos y el peso que tenía mi decisión en dicho evento, también sirvió esto para saber que no hay trabajo más ingrato que aquel que se hace para la sociedad al colectivo y que estamos como estamos por lo tóxico y nocivo que podemos ser hasta para con nosotros mismos. Mi satisfacción, mi premio, mi almohada es una conciencia tranquila y tengan la plena seguridad que es así, que todas las cosas positivas o negativas me han fortalecido, me han dado más ímpetu y seguridad para continuar, y me han demostrado asimismo como se los manifesté a mis compañeros que el enemigo puede ser mi mejor aliado en la guerra y mi mejor apoyo en la defensa, por eso jamás se debe hablar ni hacer comentarios negativos de personas solo por rumores, o percepciones de los demás, démonos la oportunidad de conocerlos, conversar con esa persona y finalmente sacar nuestra propio conclusión, tengamos empatía, hay estilos y casi involuntarios estos son natos. Tengan la certeza que no siento pena ajena, ni ratón moral por mi decisión, y lo más importante no tengo que recoger los vidrios, solo siento un gran deseo de transformar y hacer que las cosas sucedan, mi moral está intacta.
Soy responsable de lo que pienso, digo, escribo y hago, mas no de lo que me interpretan. ¡Saludos!
